Nuestra querida y antigua alumna Mª ISABEL DURÁN HERNÁNDEZ ha sido la ganadora, este año, del "Concurso de Relatos Breves" que ha convocado La Feria del Libro de Cáceres, en la Modalidad B para alumnos de 3º y 4º de la ESO y Bachillerato. Mª Isabel cursa actualmene 4º de la ESO en el IES "Norba".
¡Enhorabuena Isabel! y sigue escribiendo, que esto... ¡promete!
A continuación podeis leer el magnifico relato que presentó y con el que ha alcanzado este bonito premio.
ANTÍGONA
Todo quedó reducido a cenizas. Miles de las más impresionantes historias
y cientos de vidas encontraron el final aquel funesto día. La Muerte y la Destrucción se
abrieron paso por las grandes puertas de la Biblioteca para acabar
con los sueños de tantas personas. En cuestión de horas comenzó una nueva época de ignorancia y oscuridad.
Fue el fin de Alejandría.
------------------------------------------------
No fue difícil encontrarla, su cúpula se veía por encima del resto de
edificios. Pronto me hallé ante aquella grandiosa entrada al saber y nada más
cruzarla supe que aquél era mi hogar. Anduve hasta el centro de aquella enorme
sala para poder contemplar lo que me rodeaba.
Miles de estanterías repletas de volúmenes se alzaban orgullosas por toda
aquella estancia. Cada uno de esos tomos me llamaba para adentrarme en la
historia que narraban sus hojas. Parecía imposible que aquello hubiese sido
creado por alguien. La exquisitez de las columnas talladas cuidadosamente en
piedra maciza, el tono dorado de la cúpula adornada con esculturas maravillosas
que jamás viera el hombre, todo invitaba a permanecer hasta que memorizara cada
rincón de esa impresionante biblioteca.
Pero pronto me acordé de lo que me había llevado hasta allí. No me iría
sin leer “Antígona” de Sófocles, aunque
pareciese difícil de encontrar.
Sin más demora lo busqué en la estantería cercana pero al fracasar en el
intento decidí preguntarle a un hombre cargado con volúmenes.
- Perdone, ¿sabría
usted dónde puedo hallar los tomos de Sófocles?
- Todos los
documentos están colocados según el tema y el autor. Búsquelo por orden alfabético
- después de decir eso se giró marchándose. Cuando por fin había encontrado el
estante de Sófocles, una densa nube de humo lleno la sala.
Empezó a hacer calor y al darme la
vuelta vi como, lenguas de fuego devoraban cualquier documento que hubiese a su
paso. El fuego, al igual que la muerte, no hacía distinciones. El hombre al que
había hablado antes se lanzó, sin pensárselo dos veces, a intentar rescatar
algunos de los libros que amenazaban con ser destruidos pero las llamas
pudieron con él y con tantas otras personas que su amor por la cultura les llevó
a arriesgar su propia vida.
Estaba paralizado, no sabía como debía responder en aquella situación
pero los empujones y gritos de los hombres que luchaban desesperados en su
intento de vencer a la destrucción me llevaron de vuelta a la realidad. Mis movimientos
estaban mecanizados, la mente no me respondía, por lo que lo único que podía
hacer era imitar a los demás rescatando todos los volúmenes que estaban a mi
alcance. Algunos estantes se fueron vaciando y otros fueron quemados en el
imparable avance del fuego.
El aire se volvía denso, cada vez era más difícil respirar. Me dolían los
pulmones y a cada segundo que pasaba sentía como mi final se acercaba. Las
piernas me pesaban. El sueño me iba invadiendo pero no pensaba desistir. Seguí cogiendo
tomos hasta que las piernas me fallaron. Ya no tenía fuerzas para luchar. Los
párpados me ardían y se me iban cerrando. A quince pasos de mí el manuscrito de
“Antígona” se fundía en una danza con el
fuego. Caí y temí que fuese para siempre.
--------------------------------------
Todo quedó reducido a cenizas. Miles de las más impresionantes historias
y cientos de vidas encontraron el final aquel funesto día. La Muerte y la Destrucción se
abrieron paso por las grandes puertas de la Biblioteca para acabar
con los sueños de tantas personas. En cuestión de horas comenzó una nueva época de ignorancia y oscuridad. Fue
el fin de Alejandría.
No hay comentarios:
Publicar un comentario